AVE MARÍA PURÍSIMA.
LA BUENA NUEVA LLEGA CON EL NACIMIENTO DE NUESTRO ETERNO SEÑOR JESUCRISTO EN BELÉN.
SE MANIFIESTA EN SU VIDA EVANGÉLICA; LA PASIÓN Y LA MUERTE EN LA CRUZ Y LA RESURRECCIÓN.
Han pasado dos siglos y el Reino sigue creciendo. Durante todo este tiempo el hombre ha estado, y está, inmerso en el proceso de VIDA ETERNA cuyas fases se van cumpliendo de forma sistemática.
Cristo ha venido a SALVARNOS, ha venido para devolvernos la inmortalidad perdida. Nuestra libertad había sido cercenada en el Principio, y en ese Principio tenía que ser recuperada. Nuestro Señor Jesucristo lo hizo, desde la Cruz logró recuperar, para Dios, al hombre perdido en las tinieblas del PECADO
La OBEDIENCIA es VITAL.
El hombre vuelve a estar, de nuevo, inserto en el PROCESO de VIDA ETERNA.
Sus padres lo engendran, en el vientre, el feto se forma para nacer a esta vida. Nace a los nueve meses, completamente formado. Ahora, y durante los años que viva, es cuando debe formarse, voluntariamente, para nacer a la eternidad.
El proceso se desarrolla contando siempre con el consentimiento voluntario del hombre.
Los padres, salvo excepciones, lo engendran voluntariamente, lo aceptan voluntariamente, lo crían voluntariamente, le dan la formación adecuada voluntariamente. El niño, voluntariamente, va aceptando todas las decisiones que sus padres deciden por él. Después, cuando llege su momento, el joven decidirá, voluntariamente, cómo vestirse, que carrera universitaria emprender, la mujer que será su esposa y sobre todo crecer espiritualmente en CRISTO aceptando, y practicando, los Sacramentos de Vida que GRATUÍTAMENTE dispensa la Santa Madre IGLESIA CATÓLICA.
El Camino ya está marcado. CRISTO nos lo muestra y nos invita a seguirle VOLUNTARIAMENTE.
CTISTO nos AYUDA a FORMARNOS para NACER. Sin Él no seremos capaces de hacerlo. Sin Él PECAREMOS y moriremos sin remedio.
SEGUIREMOS.........
